
Al llegar hicimos juegos de presentación, ya que muchos niños no se conocían, ni tampoco a los chicos de la unidad de Ruta que fueron a ayudarnos. Después los chicos disfrutaron con una gymkana en la que tenían que adivinar acertijos para pasar a la siguiente prueba.
Ya después de comer nos relajamos haciendo un portalápices con papel mache que dejamos para pintar en otra ocasión. Y para finalizar antes de que fueran los padres a recogerlos aprendimos muchos juegos con los que nos hicimos más amigos y nos lo pasamos muy bien.
Es necesario dar las gracias a los rutas por su ayuda, tanto a la hora de realizar actividades como a la de tratar con los niños.